Zona Especial de Conservación de Hernio-Gazume
Maravilloso enclave natural de opciones diversas
La cima del Hernio es uno de los lugares más emblemáticos de Gipuzkoa, motivo por el que acoge a miles de visitantes a lo largo de todo el año. Su macizo, compuesto por otros bellos picos y un entorno natural protegido, está cargado de historia, costumbres y leyendas.
2160 hectáreas
Hernio-Gazume es una Zona Especial de Conservación y parte de la Red Natura 2000, por su valor ecológico y paisajístico, con infinidad de cuevas y frondosos bosques, donde habitan especies de fauna amenazada.
Hernio, el mirador de Gipuzkoa
La cumbre de Hernio (1.075 m.), comandada por su imponente cruz, otras muchas a su alrededor, ofrece una vista 360º sin igual. Se avista desde buena parte de la costa cantábrica guipuzcoana, a su interior, así como otros de los picos más importantes de Euskal Herria.
Romerías en Zelatun
Todos los domingos de septiembre se celebran romerías en las campas de Zelatun, que reúnen a miles de personas formando un ambiente festivo amenizado por trikitilaris. Allí hay dos bares que ofrecen bocados, también a lo largo de todo el año. Más arriba, bajo el pico del Hernio, antes de su última rampa, es costumbre pasar el cuerpo por varios aros de hierro forjado: según la leyenda esto ayuda a mantener una buena salud.
Descubre la riqueza natural y cultural
El Centro de Interpretación Fagus Alkiza, que se sitúa en el desván del ayuntamiento de Alkiza, pone en valor la riqueza natural y cultural de la Zona Especial de Conservación Hernio-Gazume, con exposiciones que abordan tres ejes principales: naturaleza, el ser humano y la cultura.
Numerosas vías de entrada
El macizo del Hernio abarca tres comarcas, con lo que hay muchas opciones para recorrerla. En Tolosaldea, se puede acceder por Asteasu (Andazarrate), Larraul, Alkiza, Hernialde, Tolosa (desde Aldaba y Urkizu), Albiztur y Bidania-Goiatz.
En el cresterío del Hernio hay otras cimas de gran belleza
Gazume (998 m.)
Se sitúa al otro lado del collado de Zelatun, y ofrece hermosas vistas.
Mendikute (803 m.)
En la cima existen las ruinas de una antigua fortaleza del Reyno de Navarra, que data del siglo XI-XII. También hay una cueva en las inmediaciones.
Intxur (765 m.)
Quedan restos de un recinto defensivo de la Edad del Hierro.
Erniozabal (1.018 m.)
Hay una bellas vistas hacia el mar y Tolosa. En la bajada hacia Tolosa se pasa por el collado de Lizarbakar, Fresno Solitario, un lugar admirado por la población local.